Se trata de un nuevo procedimiento ya que como principal novedad no utiliza agua y consiste en nutrir, regenerar e hidratar a la vez piel y uña, siendo así más fácil trabajar las cutículas.

En Brasil, el cuidado de las uñas es muy importante y a cada estación hay muchas novedades en esmaltes. 

La técnica de la manicura brasileña valoriza las manos, al dejarlas con una apariencia más elegante, ya que las uñas después de pintadas parecen más alargadas.

Cómo funciona la manicura brasileña.

En primer lugar se limpian las uñas, se cortan y se liman. Después se colocan unos guantes en las manos, los cuales tienen principios activos de origen botánico, nutriendo así la mano en profundidad. Hay que dejarlos actuar durante unos diez minutos. A continuación se cortan sólo las puntas de los guantes para poder así cortar las cutículas mientras la loción sigue actuando en el resto de la mano. El fin de eliminar las cutículas es despejar la uña y así los dedos se estilizan y el esmalte que se añade luce mejor (al contrario de lo que se cree, la retirada de los excesos de la cutícula no daña la uña, al revés, la deja mucho más bonita)